El registro de marca es el proceso legal fundamental a través del cual una entidad, ya sea persona física o jurídica, asegura el derecho exclusivo para utilizar un signo distintivo (como palabras, logotipos, símbolos, diseños o combinaciones de colores). Este derecho permite identificar y diferenciar sus productos o servicios en el mercado, estableciendo una identidad clara frente a la competencia.

  1. Derecho Exclusivo: Otorga al titular la prerrogativa única de usar la marca dentro de las clases de productos o servicios registradas, impidiendo su uso no autorizado por terceros.
  2. Protección Jurídica: Habilita al titular para emprender acciones legales contra cualquier imitación, copia o uso indebido de la marca, salvaguardando su inversión y reputación.
  3. Activo Comercial Valioso: Una marca registrada se convierte en un activo intangible de alto valor, susceptible de ser vendido, licenciado o utilizado en modelos de franquicia, potenciando su valor empresarial.
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  5. Vigencia y Renovación: Aunque la protección inicial suele ser de 10 años en la mayoría de jurisdicciones, esta puede renovarse indefinidamente, asegurando la continuidad de sus derechos.
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